Escrito por Mauricio García León
Viernes, 18 de Diciembre de 2009 10:09
Son 18 los empresarios muertos este año en Puebla y estados circunvecinos como Tlaxcala, Hidalgo, Morelos y Veracruz, al convertirse en “la carne de cañón de los delincuentes”.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido Puebla-Tlaxcala, Antonio Bassil Alam, consideró que hoy más que nunca los empresarios se encuentran susceptibles y vulnerables al clima de inseguridad, incluidos secuestros express aquí.
Asaltos a camionetas, en las calles, agresiones y enfrentamientos con el delincuente que deriva en la pérdida de vida son las constantes, apuntó Bassil Alam en torno a estos fallecimientos.
El caso más reciente que afectó a los industriales del vestido es el de Pablo Chilian, hermano del consejero de la CNIV Puebla Tlaxcala, Federico Chilian Espinosa, ultimado en Veracruz por presuntos sicarios luego de que acudió a un local para ofrecer playeras tipo Polo.
Luego de salir del local en Poza Rica el viernes pasado, acompañado de un amigo de nombre Jorge, tanto este como Pablo fueron “virtualmente apañados” por policías, subidos a una camioneta y golpeados con palos similares a los que se usan para los cazos de carnitas.
Serían arrojados después en un paraje, Pablo con las costillas rotas y las vísceras estalladas, lo que le provocó la muerte.
Los industriales del vestido demandaron justicia, luego de que la única respuesta por parte del gobierno de Veracruz, fue un machote de carta donde le expresa sus condolencias y “pronta resignación” por la perdida.
Se dice que la dependienta o propietaria de la tienda tenía una pareja celosa, presunto Zeta o Policía, que al percatarse de que Chilian le dejó una tarjeta se le hizo fácil para dar una lección golpear y matar al empresario.
PERDIDAS MULTIMILLONARIAS
Aunado a esto, por la ilegalidad las pérdidas para los industriales suman 25 mil millones de pesos por concepto del contrabando y la piratería.
Alrededor del 62 por ciento del mercado del vestido está en manos de la ilegalidad y aunque se han hecho operativos y cremado mercancía en hornos de cementeras, mucha de la ropa decomisada vuelve a los tianguis como ropa de segundo mano o usada.
Son 250 mil empleos los que se han dejado de generar por ese desplazamiento de productos nacionales, aunque el sector reporta un saldo positivo en empleo durante el 2009, en función del repunte en exportaciones y en las ventas a tiendas de auto servicio y departamentales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario